domingo, 12 de mayo de 2013

Zac Gorman y Magical Game Time

Zac Gorman es un ilustrador norteamericano criado en Detroit pero afincado en Chicago, cuyo trabajo se ha paseado por bastantes blogs y webs especializadas en videojuegos*. ¿Por qué? Porque a pesar de que su trabajo se mueve por distintos sectores, han sido sus particulares viñetas vinculadas al mundo de los videojuegos las que lo han hecho tremendamente popular.

Las páginas que Gorman ha dedicado a Zelda, Final Fantasy, Metroid y otros juegos legendarios están rodeadas de un halo entrañable. Es difícil no simpatizar con ellas. En pocos casos narra aventuras en las que Link, Samus y compañía superen obstáculos o venzan a sus enemigos, sino situaciones introspectivas ajenas a las historias originales que protagonizaron. Como el mismo Gorman relataba, opta por dibujar historias sobre juegos que nunca estuvieron basados en una historia profundamente descrita, usando personajes 'mudos' sobre los que es más fácil que un jugador se auto-proyecte y vuelque sus propios sentimientos.

Las viñetas más exitosas de Gorman tienen más que ver con experiencias relatadas desde un punto de vista casi infantil alrededor de los videojuegos, donde estos se muestran siempre como una fuente de infinita inspiración, creatividad y nostalgia. Es en esta capacidad para conectar con los recuerdos y sensaciones de los jugadores de varias generaciones donde Gorman ha encontrado el éxito. El primer recopilatorio de Magical Game Time se puso a la venta como un único documento de 139 páginas y a un precio a determinar por el comprador, con una aportación mínima de 1$. Algo tremendamente loable y recomendable por un trabajo tan especial y tan valioso.

A parte de mantener su propio blog bastante activo, Zac tiene una tienda on-line donde vende todo tipo de posters, camisetas y otros objetos que al parecer permiten que se dedique plenamente a crear sus viñetas, debido a su pequeña legión de fans. A pesar de ello, parece implicado en diversos proyectos, entre los que se encuentra el diseño de personajes para algún videojuego que, según ha comentado, le gustaría llevar a cabo algún día.

Más información: Web Zac Gorman / Magical Game Time / Tienda Magical Game Time

* En Kotaku, Gorman tiene su propia 'sección' fija, donde ha ido exponiendo muchas de sus bonitas páginas animadas.

R

jueves, 9 de mayo de 2013

Homunculus de Hideo Yamamoto

La mayoría de lectores conocerán a Hideo Yamamoto por su extravagante obra Ichi The Killer, extraordinariamente adaptada a cine por Takashi Miike, cineasta que sin duda debió sentirse cómodo al trasladar la extrema violencia de la obra original a un nuevo medio.

Su última obra publicada, Homunculus, es un delirio que le ha supuesto más de siete años de trabajo y críticas bastante dispares. Su argumento empieza siendo 'simplemente' inusual para acabar convirtiéndose poco a poco en una indefinible rareza.

El protagonista, Susumu Nakoshi, es un hombre de mediana edad que se nos presenta como un sin techo que hace su vida en un desvencijado coche. Sin darnos demasiados datos sobre su origen o sobre cómo ha llegado a encontrarse en dicha situación, aparece en escena Manabu Ito, un joven y adinerado médico en prácticas de extraño aspecto que ofrece a Nakoshi la posibilidad de somertese a un experimento médico por el cual será recompensado con una generosa suma de dinero.

A pesar de las reticencias iniciales, Nakoshi acaba aceptando el trato. La cosa empieza a volverse extraña cuando Ito explica que el experimento se basa en el concepto de trepanación y sus posibles efectos beneficiosos sobre la mente y la percepción de los sujetos intervenidos. El doctor Ito, al parecer envuelto en una especie de cruzada experimental alrededor de multitud de conceptos médicos o pseudo-médicos, está dispuesto a enterrar toda teoría beneficiosa alrededor de la trepanación.

Sin embargo, en poco tiempo, el intervenido Nakoshi empieza a percibir la realidad de una forma algo distinta. Nakoshi ha ganado, gracias a la trepanación de Ito, la posibilidad de ver a los 'Homúnculos', auto-imágenes de cada persona observada que reflejan su verdadera naturaleza, sus miedos, sus dudas, sus traumas...

Poco a poco, Nakoshi se sumerje en un mundo onírico tan aterrador como atrayente, que lo acaba guiando hacia una búsqueda cuasi existencial, conectado a las vidas de otras personas y a su propio pasado.

Aunque muchos lectores han criticado lo excesivamente intrincado y bizarro del argumento a medida que la historia avanza, personalmente celebro el giro que toma la trama cuando pasa de un tono sobrenatural a otro más mundano y psicológico, aunque igualmente retorcido.

Una historia con momentos difíciles de describir, repletos de escenas incómodas de leer, impresionantemente ilustradas y algo perversas... pero que llevan inconscientemente a reflexionar sobre el miedo, la auto-imagen y la identidad sexual, temas fetiche de Yamamoto. Por supuesto, nada recomendada a menores.

Homunculus acabó ya hace un par de años en Japón, alcanzando un total de quince tomos, de los cuales nueve llegaron a publicarse en España por parte de Ponent Mon, antes de cancelar y descatalogar definitivamente la serie. Sin duda, una apuesta arriesgadísima que no debió dar sus frutos. Y es que es difícil encontrar el público adecuado a las historias de Yamamoto, que al parecer no ha iniciado ningún obra nueva desde el fin de Homunculus.

Más información: Homunculus en la Wikipedia

R.

domingo, 5 de mayo de 2013

Obsidian Kingdom: Mantiis

Hace poco, mientras buscaba información sobre la tristemente desaparecida banda egarense The City's Last Noise, Mc encontró por casualidad una referencia a un grupo particularmente interesante: Obsidian Kingdom.

Aunque llevan funcionando como banda desde 2005, fue en 2012 cuando publicaron su primera obra de larga duración: Mantiis. En diversos artículos y entrevistas se les ha relacionado con Opeth, cuya influencia han reconocido, pero que en ningún caso supone su mayor fuente de inspiración. Puedo estar de acuerdo en dicha comparación en tanto que el registro vocal se mueve entre extremos y que su calidad instrumentística es evidente, con pasajes doom que rozan lo atmosférico, mezclados con otros que son deudores del black metal más clásico. Ellos mismos han reconocido incluso la influencia de Akira Yamaoka, cosa que creo es evidente en pistas como 'Answers Revealing'. En definitiva, una banda algo difícil de catalogar.

Decir que Mantiis es lo mejor que he escuchado en muchos años en lo que respecta a metal (aunque no se definan como una banda de metal), sin entrar en subetiquetas, no es para nada descabellado y sin embargo sí muy relevante. No porque mi opinión valga nada en absoluto, sino porque como fan del metal, considero que he escuchado y escucho mucho. Y es innegable que hay valor en Mantiis.

Cada uno de los catorce fragmentos del disco están repletos de inspiración, sin decaer en ningún momento ni repetir patrones en exceso. La calidad de su producción es digna de los grandes. Es necesario escuchar el disco no menos de quince veces para apreciar cada matiz del mismo. Os aseguro que Mantiis invita a ello. Lo mejor de todo es que el disco es vuestro desde YA. Podéis escuchar o descargar el disco íntegramente desde Basecamp y, por supuesto, pagar por una copia física del mismo si lo deseáis. La calidad de su trabajo bien lo merece.

El muy notable diseño gráfico vinculado a Mantiis y a la banda en general es en gran parte mérito de Ritxi Ostáriz (junto a Elena Gallen), lo que sin duda explica ese inmediatamente perceptible buen hacer y delicioso acabado que en este aspecto coloca a Obsidian Kingdom en el top 5 mundial en su género. Y no hay más que hablar en este sentido.

Reto a cualquier lector de este blog que se considere fan del metal a escuchar íntegramente Mantiis y poner en duda alguno de los elogios que le dedicamos desde 2Blck. Quiero pensar que Obsidian Kingdom ha empezado a despegar hace poco a pesar de su trayectoria, porque sería una lástima que una banda de semejante calidad haya pasado desapercibida incluso para fans del género.

Más información: web oficial Obsidian Kingdom / Mantiis en Basecamp

R.